Consejo Nacional de

UNIDAD DEL PUEBLO

El gobierno del PP continúa, implacable, la política económica antipopular emprendida hace un año por el gobierno del PSOE en una nueva versión corregida y aumentada. Poco importa que los trabajadores se empobrezcan cada vez más, que las clases medias sientan también recortados sus derechos y su pequeño bienestar, que los pensionistas rocen la precariedad congelando las pensiones y ahora tramando recortarlas que los pequeños empresarios y autónomos no puedan acceder al crédito, que los jóvenes sigan en el paro… Esta permanente agresión a los ciudadanos renovada y recrecida cada viernes tras el consejo de ministros que haciendo gala de su tradicional inmoralidad pública protegen con una generosa amnistía fiscal a los evasores de impuestos, abaratan el despido, rebajan el sueldo a los empleados públicos.

Y mientras siguen en su guerra social contra los trabajadores/as, desplegando una frenética actividad propagandística, para intentar convencer de que las huelgas y manifestaciones no sirven para nada, que tenemos que resignarnos con la reforma laboral, la bajada de salarios, el despido fácil y barato, los recortes en la Sanidad, en la Educación, en los Servicios Sociales, en las prestaciones por el desempleo, ya que estamos inmersos en una grave crisis.

Y mienten y mucho sobre el carácter de esta crisis, de sus responsables y sobre la salida de la misma. Cuando dicen que no hay dinero para los servicios públicos esenciales o que no hay dinero para crear empleo: sencillamente mienten, porque vemos como no se escatiman esfuerzos y recursos multimillonarios para salir al rescate de los banqueros.

Esta crisis no responde a ninguna maldición bíblica, es la crisis del sistema capitalista y cuando hablan de “salir de la crisis” lo que están diciendo es ¡salir ellos y salvar su sistema!, sobre las espaldas del pueblo trabajador. Lo que no dice el Partido Popular y sus amos, es que se gastan más de doscientos millones de euros diarios en pagar los intereses de una deuda que los especuladores y los banqueros han creado y que están transformando una gigantesca deuda privada de banqueros y grandes empresarios, en deuda pública, de todos y que para pagar esa deuda se acometen los recortes, en definitiva se nos declara la guerra social a los trabajadores/as.

Y nosotros tenemos que decir que los intereses de un solo día de esa deuda supera los recortes de la Sanidad Pública de Canarias o pagar un subsidio a los trabajadores/as canarios desempleados que no perciben ninguna ayuda… esto hay que decirlo.

Frente al fatalismo y la resignación que quieren imponernos, hay que decirles a los trabajadores, a las trabajadoras que sí hay salida, que la lucha por el empleo, por salarios dignos, por la vivienda, por la educación y la sanidad pública tienen un punto de partida común que es dejar de pagar la deuda de los especuladores y los banqueros, suspender el pago de la misma y exigir una auditoría pública que ponga al descubierto el fraude y la exigencia de responsabilidades y poner esos recursos multimillonarios al servicio de un plan de rescate de los trabajadores/as y el pueblo.

Sí hay alternativa:

Unir, organizar, avanzar, por una Canarias Libre y Socialista