ILSA RODRÍGUEZ
Mayor transparencia y modificaciones paulatinas en el sistema legal marcarán el trabajo de la justicia en China en 2014, mientras el presidente Xi Jinping llama a los funcionarios públicos a luchar contra la corrupción y dar el ejemplo.
Páginas web para anunciar juicios y sentencias y la comunicación directa con el público comenzaron a operar en los últimos meses de 2013 con el fin de alcanzar más transparencia en el trabajo legal, junto al anuncio de duros castigos para los funcionarios que violen lo establecido.
En su campaña nacional contra la corrupción, tanto de tigres como moscas, como el público denomina respectivamente a los grandes jefes y a los funcionarios de bajo nivel, la dirigencia china parece dispuesta a acabar con los sobornos, el abuso de poder y otros males que desacreditan su trabajo.
Entre los cambios ya en marcha, las cortes se separarán de la administración para poder prevenir la interferencia de los gobiernos locales en su labor y evitar sentencias equivocadas.
Precisamente en 2013 las cortes chinas revirtieron varias condenas equivocadas, como la de Zhang Gaoping y su sobrino Zhang Hui, a quienes entregaron el equivalente a 180 mil dólares en compensación, cuando se demostró que eran inocentes gracias a una prueba de ADN.
Otro fue el campesino Zhang Zhenfeng, acusado de robo y violación en 2007, liberado cuando se constató que un policía había ocultado evidencia que lo exoneraba de esos hechos.
Pero sin dudas el caso más sonado del pasado año en cuanto a reivindicación fue el de Tang Hui, quien había sido enviada a un campo de reeducación a través del trabajo por reclamar sentencias más severas para los responsables de la violación en grupo de su hija cuando tenía 11 años.
Las protestas en China por ese caso consiguieron su liberación y Tang demandó a las autoridades de Yonhzhou, provincia de Hunan, por esa injusticia, en una batalla legal que ganó al recibir la compensación reclamada; el equivalente a 485 dólares.
Finalmente, el sistema de reeducación por trabajo, o laojiao por su identificación en chino, fue removido en diciembre último por decisión del Consejo de Estado, luego de mantenerse vigente desde la década de 1950.
SISTEMA LEGAL
Al marcar el camino del trabajo en el sector de justicia en 2014, el presidente Xi insistió recientemente en la importancia de que el Partido Comunista de China (PCCh) lidere la legislación, asegure el cumplimiento de las leyes y establezca el ejemplo en su cumplimiento.
En una reunión sobre trabajo político y legal, el Secretario General expresó que esa labor debe realizarse con el fin de salvaguardar las políticas partidistas y la autoridad de la ley.
Las demandas populares de sus intereses deben ser tratadas adecuadamente al tiempo que se mejoran las políticas con un impacto crucial sobre la protección del pueblo, agregó el presidente, quien exhortó a fortalecer las leyes vinculadas con la solución de conflictos.
Xi destacó entonces que debe manejarse de forma adecuada la relación entre estabilidad e intereses de la población y entre vitalidad y orden, e insistió en que no se puede permitir el abuso de poder, los juicios por negligencia y que la policía no responda a las emergencias.
Entretanto se espera en breve el anuncio de la separación del trabajo judicial de la administración, que se considera una de las tareas centrales emanadas del III Pleno del décimo octavo Comité Central del PCCh, luego de años de dependencia de las cortes del financiamiento de los gobiernos locales.
Esta situación implica que en ocasiones las cortes requieren de aprobación administrativa antes de adoptar un veredicto, lo cual desaparecerá cuando se separen ambas dependencias.
Expertos en la materia alertaron que las entidades legales del país tienen que fortalecer el conocimiento entre los jueces de esa independencia, ya que los vínculos entre lo judicial y las esferas administrativas permanecerán por algún tiempo luego de su separación oficial tras años de práctica.
PRINCIPALES CASOS JUZGADOS EN 2013
El 2013 fue un año crucial en el sistema legal de China debido al procesamiento de numerosos casos de gran impacto nacional, incluyendo varios exdirigentes de alto nivel que recibieron condenas por delitos de corrupción.
Entre ellos destaca el de Bo Xilai, exsecretario del PCCh en Chongqing, sentenciado a cadena perpetua por aceptar sobornos, corrupción y abuso de poder, en un proceso que fue calificado por la prensa china de "juicio del siglo".
Le siguen el de Liu Zhijun, exministro de Ferrocarriles, sentenciado a muerte suspendida por aceptar sobornos y abusar de su poder, y el de Lei Zhengfu, exjefe del PCCh en el distrito Beibei, Chongqing, condenado a 13 años en junio por aceptar sobornos.
Los delitos de corrupción de Lei solo fueron descubiertos después que circuló por internet un vídeo de contenido sexual, el cual condujo a la investigación de su conducta.
Otros procesos de interés nacional fueron los de Yang Dacai, exdirector de la Administración de Seguridad del Trabajo en Shaanxi, encarcelado 14 años por recibir pagos ilegales.
Yang fue enviado a los tribunales también después que circularon sus fotos en internet sonriendo en la escena de un mortal accidente de tránsito y mostrando lujosos relojes, que no están al alcance de un empleado público honesto.
En otra esfera de la justicia, los juicios más seguidos por la población incluyeron el de Hai Lei, sentenciado a muerte en Beijing por el asesinato de una niña de dos años durante una disputa por un espacio de parqueo con la madre de la criatura.
Como represalia, Hai sacó a la pequeña del coche y la proyectó contra el pavimento, una acción grabada en vídeo y divulgada en todas las redes sociales del país.
Entre los procesos que la población prestó atención en 2013 se incluyen la pena de cárcel de 10 años contra Li Tianji, el hijo de 17 años de dos cantantes famosos de China, por participar en la violación en grupo de una joven en esta capital y la sentencia de tres años en prisión contra Gong Ajai.
Gong, conocida por el público como Hermana Casa, falsificó documentos que vendió y aprovechó para adquirir 44 inmuebles.
La presión popular consiguió asimismo que la sentencia inicial de tres años de cárcel contra Guo Youchi fuera elevada a ocho, ya que se coincidió en que esa era una pena muy leve para este funcionario de un condado de la provincia de Yunnan, responsable de violar una niña de cuatro años.
Los expertos señalan que con la introducción de los mecanismos de información y contacto con el público, que a través de las respectivas páginas web de las cortes puede denunciar cualquier caso, la justicia en China estará muy ocupada en 2014.
|
|
Tweet |
|
